Historia de Karash

La oscura noche caia sobre eternia , seguida de un manto de agua en forma de lluvia , la figura de un hombre cubierto con una capa con capucha la cual ocultaba sus rasgos, se acercaba lentamente a las puertas del bastion de Erina. La guardia abrió las puertas al reconocer al hombre y su insignia, aunque sus rasgos poco se parecian a los del caballero que fue hace algunos años al frente junto a su peloton, el hombre tropezo por sus cansadas piernas llevando dias sin descansar, el brusco movimiento hizo que en el silencio de la noche, la voz de un infante resonara por el patio interior, el hombre acuno al pequeño y le presto atenciones para acallar su llanto mientras seguia acercandose al templo lo mas rapido que pudo.

El sonido de los picaportes al ser golpeados resono en el lugar , mientras la oscuridad se apartaba austada ante la luz que salia del interior del templo al abrir sus puertas, el hombre noto desde hace mucho tiempo el calor del hogar y alzo la vista observando a la sacerdotisa que le brindo la entrada al recinto, el hombre agotado entro con la cesta entre sus brazos cubriendola de la lluvia hasta el fondo del templo. La joven sacerdotisa observo en silencio y alterada el estado del caballero, mientras el mismo dejaba la cesta sobre el altar, el lugar mas a mano que encontró.

Sacerdotisa: -¿caballero , que os ocurre? ¿os encontrais bien?, vuestras heridas parecen graves...dejadme que las examine...
Caballero: -Tranquila mi señora, las heridas no son de importancia en estos momentos...mi camino hacia el hacedor pronto me alcanzará..lo que os debo anunciar es mas importante, observar.

El caballero descubrió al infante de su cesta, la sacerdotisa llevo sus manos a sus labios exclamando al hacedor lo que sus ojos estaban observando. Al descubrir al infante, los rasgos claramente no eran los de un niño normal, su escaso pelo era del color blanco mas puro que la nieve. los ojos que observaban con atencion a las figuras alli reunidas portaban en su iris un color dorado. Ambos observaron al pequeño fascinado, no sabian realmente que era, pero sentian una gran bondad en el corazon del pequeño, mas que la de cualquier infante.

Sacerdotisa: -Este pequeño....no puede ser....sus rasgos...no son normales....
El caballero negó lentamente con la cabeza: -no mi señora, no lo son, puesto que es un hijo de un ser celestial...Tuvimos suerte de encontrarlo con vida....nuestras tropas estaban destinadas a un pequeño pueblo, el cual estaba bajo la incursion de las tropas Berekositas, llegamos tarde, los aldeanos ya empezaron a sufrir la rabia de los corazones de esos hombres....nuestro batallon se abalanzo sobre ellos a enfrentarse e intentar encontrar supervivientes...
La sacerdotisa miró al pequeño y busco acariciarlo con su mano, el pequeño como un acto reflejo levanto su manita y cogio el dedo pulgar de la sacerdotisa esbozando una sonrisa , una sonrisa que resono por el templo y trajo la luz del alba al santuario, y algunos de esos rayos de luz iluminaban al infante mientras sonreia.

Caballero: Mientras mis compañeros seguian luchando contra las tropas de Berekost...escuche un estruendo enorme en una de las pequeñas casas, algo que varios de los mios no se percataron....al entrar pude observar a un hombre con una armadura oscura y una espada creada de de maldad pura luchando, contra una mujer celestial...de alas blancas...con su espada encendida en llamas y un aura brillante...detrás de ellos habia el cuerpo de un caballero herido de muerte, con simbolos del hacedor sobre su armadura y protegiendo aun al infante...No sabia como actuar, el ser celestial seguia luchando protegiendo al hombre y al infante contra el hombre de la armadura oscura, haciendo chocar sus armas como jamas habia visto...durante el combate y el chocar de las espadas la criatura alada emitio un fogonazo que me cego, solo escuche el gritar de dolor del caballero oscuro...el ruido de los cristales al romperse y el llanto del infante...., cuando mis ojos pudieron vislumbrar la zona, el ser alado estaba caido en el suelo intentando arrastrarse hasta el hombre con el infante...intente sanar sus heridas pero...los daños eran demasiado graves, cogiendola en brazos...me pidio que llevara al pequeño a un lugar donde la luz no se extenguiria nunca, donde el hacedor abraza a sus hijos...me dijo...que corriera de las sombras , un gran mal estaba a punto de estallar y vendria del corazon de antiguos humanos...el seria la clave para detener ese derramamiento de sangre..., despues los ojos de la celestial se posaron en los del pequeño....Karash lo llamó, acto seguido la criatura dejo de respirar y se desvanecio entre mis brazos como si fuera un sueño, solo quedo luz y tranquildad en el lugar... Asi que recogi la criatura que no paraba de llorar, y volvi al bastion en busca de un lugar para ella, pero mientras volvia...las sombras me perseguian , garras creadas de propia oscuridad buscaban aferrar al pequeño....llevo dias sin descansar para traerlo aqui...

La sacerdotisa asintio a la historia del caballero e intento sanar las heridas del buen hombre, pero como si el destino quisiera dar una mala jugada el hombre cayo agotado al suelo y sin vida , pero su sonrisa al haber cumplido la promesa a la celestial se dibujaba en su rostro.

Los años pasaron y el infante se convirtio en un joven guerrero, al servicio del hacedor, un paladin, los rasgos de su descendencia angelical jamas pasaron desapercibidos y en muchas ocasiones fue rechazado por la gente , pero jamas perdio la sonrisa que ese dia ilumino el templo, paciente y callado, siempre servicial y dispuesto a dar su vida por los hijos que tanto amaba el hacedor, ese era el codigo que seguia, aunque en su interior escuchaba la voz de una mujer, una voz que le sonaba familiar, y siempre le daba fuerzas a seguir sin saber quien era.