Del chiste a la locura (Jasper Reyer)

Capítulo 1, el comienzo.

Empezaba a anochecer y la oscuridad devoraba todo lo que no era iluminado pero en un punto de un camino entre dos pueblos bastante alejado de ambos se encontraba una mujer corriendo entre los arboles con una expresión triste en la cara, como si se le rasgara el corazón por algo que hubiera hecho hace poco, pero el tiempo pasaba y la mujer continuaba corriendo y llorando mientras el Sol daba paso a la Luna. Llego la noche y se hizo el silencio, un silencio únicamente roto por el ruido de algunos insectos y un extraño llanto que provenía de unos matorrales, el llanto de un recién nacido abandonado en una cesta sin mas cobijo que una manta a merced de las bestias del lugar, hasta que se empezaron a escuchar otros ruidos. Sonidos de caballos andando, de ruedas de madera golpeando el camino y de voces hablando y riendo que todo junto hacía que el llanto del neonato pasara desapercibido, un desfile de caravanas pintadas de forma llamativa y con unos ocupantes no menos discretos atravesaba la oscuridad para llegar al siguiente pueblo antes del amanecer y poder desplegar el gran espectáculo que era La Troupe de Splendid.


Las caravanas empezaron a pasar al lado de la cesta sin advertirse de su presencia hasta que una hermosa mujer en la primera carreta que había escuchado algo raro hizo que se detuviera la marcha y empezó a buscar el origen de lo que parecía un llanto.

Al poco rato encontró la cesta y entonces el conductor de la primera carreta, el director de la troupe, se dirigió con tono melancólico y triste a su mujer que cargaba el bebe en brazos.


- Natasha ¿que vas a hacer con ese niño?

La mujer al ver que el bebe había sido abandonado no pudo sino contestarle con una sonrisa en la cara.


- Querido Ruggier no podemos dejarlo aquí, además este niño puede ayudarnos a superar la muerte de nuestro amado hijo.

El hombre al volver a ver feliz a su mujer desde el fatídico accidente que les arrebató a su hijo no le quedo mas remedio que aceptar, abrazarla y acompañarla hasta la carreta para proseguir la marcha.

Los días pasaron para la troupe y todo su elenco de actores, desde payasos hasta prestidigitadores, fascinaban en todo aquel pueblo que visitaban mientras que la presencia del bebe empezó a ser algo normal para ellos. Un día, una de las bailarinas le pregunto a la esposa del director mientras acariciaba al niño:

- Natasha ¿has pensado ya que nombre le vas a poner al bebe?

Al no saber que contestarle a la bailarina, la mujer se fijo en el tono rojizo del cabello de la criatura y le contesto:

- Jasper, creo que es un nombre perfecto para él.



//Asi empieza la historia de nuestro "querido" bufón, con fotos incluidas de sus padres xD la 1ª foto es lo mas parecido que he encontrado a mi idea de la Troupe de Splendide.
//Mi estilo al escribir no es el mejor del mundo y no me suele venir la inspiración muy a menudo, pero intentare seguirla tan rapido como pueda.

Me gusta el comienzo de la historia

Capítulo 2, el destino.

10 años después.

El tiempo pasaba y a medida que la compañía pasaba por distintos pueblos el bebe fue creciendo y tomando responsabilidades entre su nueva familia, desde cuidar a los animales hasta cocinar pero la noche que cumplió 10 años, su madre tuvo una charla especial con el niño.

- Bien Jasper a partir de mañana tendrás que empezar los ensayos para formar parte del espectáculo, dime ¿que te gustaría ser? ¿trapecista, domador de animales, tragafuegos?

El niño sabia que algún día tendría que salir al escenario pero a pesar de llevar mucho tiempo pensándolo, aún no sabía que tipo de artista iba a ser en el futuro.

- No lo se Madre, me gustaría un poco mas de tiempo para decidirme.

Natasha aceptó y como era costumbre en ella, sonrío y le dio un beso en la frente antes de apagar la luz para que su querido hijo durmiera.

Al día siguiente, Jasper se levantó muy temprano y empezó a pasear por las instalaciones desplegadas por la compañía y observó los ensayos de todos sus amigos que desde hace ya años, era su nueva familia.
Payasos, lanzadores de cuchillos, malabaristas, el elenco parecía no tener fin y el muchacho no se decidía, cuando entonces su padre Ruggier le pidió un favor.

- Jasper por favor ve a mi caravana y traeme mi sombrero, debe de estar encima de mi mesa.

Como un buen hijo hizo caso a su padre y no tardó en ir hacia la caravana de sus padres. Por muchas veces que había entrado para él aún era un lugar que le infundía mucho respeto, por lo que cogió el sombrero y se dispuso a llevárselo a su padre hasta que, al fondo de la habitación, observó un baúl pintado con muchos colores llamativos, un baúl en el que estaba escrito sobre la madera el nombre “Valant”.


Instantáneamente al pequeño le entraron ganas de abrir el baúl y en su interior descubrió un precioso traje rojo de bufón, una marioneta vestida con el mismo traje y un libro titulado “Chistes del gran Valant”. Poco tardó en leer alguno de los chistes que contenía el libro y empezar a reírse como nunca lo había hecho, hasta que oyó que se abría la puerta.

- Así que por eso no me traías el sombrero ¿eh, hijo?

Nada mas darse cuenta que era su padre el que había entrado se incorporó y le pidió disculpas.

- ¿Pero Padre, quién es ese tal Valant?

Ruggier al ver que su hijo se moría por saberlo, le dijo.

- Valant era el nombre de mi difunto hermano, el mejor bufón que ha tenido nunca nuestra compañía. Si te fijas, en la parte interior superior del cofre hay un retrato suyo en una de sus actuaciones.

El chico miro dentro del cofre y en la parte de arriba ahi estaba, tal y como habia dicho su padre, el retrato de un bufon con una mascara.


Su padre le contó que con una simple pirueta que acabara en una caída su tío era capaz de hacer reír a todo el público y que a base de chistes y otros recursos humorísticos la gente no paraba de reír hasta el final de la función.

El joven se marchó de la caravana tras haberle agradecido a su padre tan maravillosa historia y empezó a pensar durante varias horas. Entrada ya la noche y antes de ir a acostarse su madre le preguntó si ya se había decidido a lo que le contesto que ella y Ruggier esperaran enfrente de su caravana.
Ambos padres estaban impacientes por saber que iba a hacer su hijo, cuando la puerta se abrió y el niño salió con el traje puesto y una sonrisa de oreja a oreja.

- Madre, Padre ¡quiero ser bufón!

Natasha y Valant al ver a su hijo dentro de un traje varias tallas mayor que la suya empezaron a reir y aceptaron la decisión de su hijo.

- Ahora ve a dormir Jasper, mañana tendrás que empezar a ensayar y no te preocupes por el traje, para mañana lo tendras ajustado a tu medida.

El joven se quito el traje y se fue a dormir pensando en su futuro como bufón y en ese precioso traje rojo y como le quedaría.

Como siempre crack una gran historia

Sep, ta guapa, leedla todos y sino os pegaré.

Yo la he leido, que conste¡¡